CERRADO POR ATARDECER

Con este blog quiero compartir con vosotros estos relatos fruto de vivencias, experiencias, reflexiones, etc.etc. Por tanto la mayor pretensión es que os gusten y os animéis a dejar algún comentario o sugerencia para animar y motivar futuros escritos que ayuden al crecimiento personal y alejarnos en la medida de lo posible de fatalismos y mediocridades.



UN ABRAZO A
TOD@S

viernes, 6 de septiembre de 2013

MALOS TIEMPOS PARA HÉROES





La escena transcurrió en un pueblo de Asturias, aunque a decir verdad podría haber sucedido en cualquier lugar porque el dónde es la anécdota y el qué, es la triste y cruda realidad personificada.
Los personajes de esta “toma” los conforman un superhéroe, una madre y una hija. Analizo uno por uno a los personajes aportando la referencia del día, la hora y la climatología que contextualizaba la secuencia. Lunes 2 de septiembre de 2013 a las 10:45 de la mañana, donde el sol brillaba y aportaba luz y calidez a lo que estaba a punto de suceder.
Sentado en un banco se encontraba inmóvil nuestro personaje de videojuego, perfectamente caracterizado, que hasta los que nunca hemos jugado con él, sabemos a la perfección su nombre, y lo que tiene aún más mérito, su apellido. Se trababa del mismísimo Super Mario Bros, el cual recibiendo los primeros rayos soleados del día esperaba y esperaba. Posiblemente esperaba un saludo de sus muchos incondicionales con los cuales ha compartido puntos y partidas, o tal vez regresar a la pantalla y al mundo virtual del que nunca debió salir. Pero él seguía allí, albergando en su interior a vete a saber quién, viendo pasar el tiempo  y a la madre y a la niña que se iban acercando.
La niña abrió los ojos de la sorpresa -esos que consiguen ver en gran angular cuando interesa- al descubrir al personaje, como encontrando a un conocido al que solo los niños saben reconocer y saludar. La niña iba de la mano de la que parecía ser su madre, por lo tanto el paso de ambas era firme y dirigido, lo que no impidió a la criatura saludar con la mano libre a su colega de universo infantil, con la energía y emoción propia de quien acaba de encontrar a un vecino o amigo de planeta.
La supuesta madre , y a una prudente distancia, vio iluminar el semblante de la supuesta hija, pero en ningún momento aflojó el paso para que esta se recrease con el gran Super Mario, por lo tanto el saludo fue efímero y duró lo que dura una pasada a paso ligero por delante de un superhéroe.
Hasta aquí todo más o menos normal, en un lunes de verano Asturiano donde no falta de nada y el ritmo del pueblo es el habitual después de un domingo invadido por los turistas que buscan descanso, paisajes y gastronomía. Vamos un paraíso que por un instante te hace olvidar tanta crisis, tanta miseria y tanta mediocridad política que acampa en este nuestro resignado país.
Perdón, pero llegado a este punto de la historia hay un pequeño detalle que no me deja  olvidar este rejodido contexto económico, social y político al que hago alusión. Todo era idílico en el paraíso natural, sino fuera porque el gran Super Mario sostenía un cartón en sus manos y en su inmovilidad en el que se podía leer: Necesito una ayuda. Mario.
Y pensé que mal van las cosas en un país cuando sus superhéroes piden ayuda a los mortales. ¿Qué nos quedará por ver y a quién? No nos hagamos muchas ilusiones con Hello Kitty y Bob Esponja porque nos pueden sorprender a la vuelta de la esquina y vete tú a saber haciendo qué. Y mal van las cosas también cuando en cualquier lugar un adulto es incapaz de explicar a un crío la realidad que no se ve o que no se quiere mirar. En fin…así nos sigue yendo.

Toño Villalón