CERRADO POR ATARDECER

Con este blog quiero compartir con vosotros estos relatos fruto de vivencias, experiencias, reflexiones, etc.etc. Por tanto la mayor pretensión es que os gusten y os animéis a dejar algún comentario o sugerencia para animar y motivar futuros escritos que ayuden al crecimiento personal y alejarnos en la medida de lo posible de fatalismos y mediocridades.



UN ABRAZO A
TOD@S

miércoles, 25 de diciembre de 2013

LITERATURA PARA UNA SOLA MANO


Ahora que me recojo en mis silencios productivos me ha dado por imaginar un mundo anhelado regido por y para soñadores, donde levantarse cada mañana suponga la emoción del primer día de vacaciones, donde no haya que justificar porqué y hacia dónde voy, donde los compañeros de viaje lleven por equipaje la risa, por pasaporte la bondad y por actitud el disfrute. Donde los derechos no los tuerza la soberbia y el poder de unos pocos, ni la mediocridad de otros tantos. Los niños aprenderán que las lecciones más importantes están publicadas en la editorial “vida”, que las matemáticas más prácticas comienzan al contar gominolas, que el arte tal vez no nos dé de comer, pero nos alimentará el alma de por vida y que nada de lo que se haga a esa edad es definitivo porque solo las máquinas vienen con garantía de repetitividad y certificado de defunción obsolescente. Los parques serán a las ciudades lo que los pulmones al cuerpo, los árboles contarán su historia como valla de protección más eficaz y las numerosas fuentes nos recordarán que el agua siempre fue el bien más necesario y accesible. Solo las bicicletas y patines contarán con planes “pives y renoves” y los carriles-coche se convertirán en autopistas de respeto hacia el medio que los acoge. Los políticos trabajarán en la calle tanto como en el despacho, ¿de qué otra manera podrían saber los verdaderos problemas de sus gentes y ciudades? Un mundo en definitiva donde la belleza sea la tónica, la paz el resultado y la justicia se quite la venda de una vez por todas. Si es el hilo el que hace embellecer a la cometa, por qué no empezamos entre todos a soltarlo. Tal vez sea la forma en que dejemos de anhelar este mundo y de que empecemos a materializar los sueños que nos merecemos por ser quienes somos: hombres y mujeres programados para ser felices. ¿Te apuntas?

Toño Villalón

LA CERTEZA DE SAMUEL

Samuel se acercó con su bicicleta junto a la mía. Mi perro lo observó atentamente y me miró como diciéndome: “este chaval merece un rato de charla”. El niño y yo bicicleamos en paralelo hasta nuestro pueblo. Me preguntó sobre qué sabía hacer mi mascota. Yo le respondí que sabía sentarse, echarse, saltar, rodar por el suelo, besar, dar la pata…vamos cosas de perros. Su cara de extrañeza cuando oyó la palabra “besar” asociada al animal, transparentó su siguiente pregunta: ¿y puedes hacer ahora que dé un beso? Detuvimos las bicicletas y el perro respondió rápidamente a la orden. Retomamos la marcha y el chaval, alucinado, siguió en paralelo y su siguiente pregunta –preguntar sigue yendo en el adn de los niños- fue: ¿y tú…qué sabes hacer? Yo le miré atónito, pensando que descolocar sigue siendo inherente a la condición de ser niño. Mi respuesta fue envuelta en un tono de seguridad, para camuflar el descoloque que el crío me acababa de provocar:
“Sé montar en bicicleta, subir montañas, disfrutar con todos los tonos del cielo, educar un perro, descubrir el mejor sitio para coger moras, nadar en el río, plantar un huerto, contar historias y hacer una rica tortilla de patatas”.
El chaval sonrió. Supongo que esa era la última respuesta que esperaba oír de un adulto; al igual que yo que jamás esperaba que antes de despedirse el crío me dijera: “vale…ahora ya entiendo porque tu perro sabe besar”. Nos separamos y tengo la impresión de que ambos regresamos a casa con cierta sensación de bienestar y agradeciendo a la vida tener a alguien cerca que valore el potencial de un beso.

Toño Villalón.

LA MIRADA


“Cuando somos conscientes que nuestra mirada pertenece solo a nuestro mundo, podremos ver con perspectiva la realidad que nos circunda”. Este es el consejo inesperado que me regaló aquel abuelo en el parque mientras, de manera casi inocente, alimentaba a las palomas que lo rodeaban. Tal vez me brindó esta cita al percibir mi mirada de reojo mientras hacía abdominales en un banco próximo al suyo, casi como exhibiéndome ante su senectud.
Al regresar a mi casa y después del aseo reglamentario, quise coger un álbum de fotos, de aquellos de la era predigital y teniendo aún en mi mente el constructo filosófico de aquel enigmático anciano. Me di cuenta de que quise mirar con tanta intensidad aquellas fotografías que me olvidé de disfrutarlas, y solo cuando decidí sentir cada una de ellas, comencé a enfocar mi propio bienestar. Recordé cada instante, cada época, cada olor y cada persona que configura mi mapa relacional ahora impreso ante mí en papel fotográfico. Todos los recuerdos que iban apareciendo me dejaron cierto poso de tranquilidad y gratitud. Salvo una de las fotos que me evocó una frase que con cierta nitidez se abría paso a través del subconsciente; tal vez por la contundencia o por la rabia contenida del instante en que años atrás la pronuncié: “Mientras sigas pensando que solo soy lo que ves de mí, la ceguera la seguirás padeciendo tú”. Desde aquel instante en que decidí quitarme las vendas de los ojos, pude ver más allá de mi propia fragilidad y comencé a estar un poco más cerca de la ansiada y liberadora felicidad. Al fin y al cabo todo es una cuestión de óptica y de rebeldía ante la vulgar y agónica normalidad.


Toño Villalón

SOÑADORES

“Resulta llamativo pero nadie consiguió el puesto de trabajo para la empresa de venta de camas y colchones. Hubo inmaculados currículum pero, incomprensiblemente, para esta oferta de empleo faltaron los soñadores”.

Toño Villalón

NO ES NORMAL


Desde que éramos nómadas lo normal era trasladarnos con nuestros enseres de un punto “x” a otro “y”. Con el invento de la rueda esta tarea nos facilitó mucho la vida y nos liberó de no pocas cargas innecesarias. También lo normal era que las personas de edad avanzada delegasen algunas de sus tareas más pesadas en familiares o vecinos; y a falta de estos decidimos dotarnos, porque entendimos que era bueno y necesario, de un Estado del Bienestar donde uno de sus pilares básicos son los servicios sociales, que intentan proteger al desprotegido, ayudar al necesitado y esperanzar al desesperado. Todo esto digo, era más o menos lo normal.
No conocí nada de tu vida, por lo tanto me parece tremendamente injusto que hoy sepa de ti por tu forma de morir –desgraciadamente esto me pasa contigo y con media humanidad-. Supongo que tu vida en los últimos días no fue precisamente un camino de rosas, ya que fuiste a perecer allí donde lo suelen hacer los perros callejeros y supongo que así era tu vida…bastante perra a juzgar por la noticia de prensa:
“Mujer de 71 años de edad muere atropellada la madrugada del día tres de noviembre a las 2:30 horas en la autovía A-6. El fuerte impacto causó en la víctima varios traumatismos torácicos y craneoencefálicos que le causaron la muerte de manera inmediata. Los servicios de asistencia nada pudieron hacer por salvar su vida”
71 años de edad, 2:30 de la madrugada, caminando por una autovía y tirando de sus pertenencias –ropa y comida-. Esto no es normal.
Me imagino el escenario después del atropello iluminado de luces parpadeantes de guardia civil y samur y me entristece pensar que todo ese despliegue luminotécnico no pudiera haber sido utilizado para prevenir tan fatal desenlace. También me entristece y me duele pensar que una persona septuagenaria no estuviese acogida y descansando después de un gran día vivido y de una gran vivida vida.
El próximo 24 de Noviembre se recordará a toda la sociedad y hasta la saciedad, las injusticias y vulneración de derechos que viven y sufren en nuestro país las personas sin hogar. Ojalá que nuestras conciencias se alineen con nuestros corazones y lancemos todos al unísono un grito que evidencie que hoy día no podemos seguir permitiéndonos cosas que nunca lo fueron y nunca serán normales, por mucho que así nos lo quieran hacer creer.
Peregrina a tu pesar: Descansa en paz.

Toño Villalón

EL AJEDREZ


Colócame cual peón
en este tablero de ajedrez,
que hoy quiero jugar al son,
sin ninguna dejadez.

Que ya no quiero servir a reyes
ni defender torres ni reinas,
que quiero sumar peones
cuya sangre hierva por las venas.

Dame juegos para crecer,
nobleza para hacer justicia,
dame vida para entender
que lo que mata es la codicia.

Que ya se aproxima la hora
del juego de nunca acabar,
si quieres vencer ahora,
algo tendrá que cambiar.

Reinventa las reglas del juego,
para que todos podamos jugar,
que yo ya no cubro monarcas
que por mi dejaron de luchar.

Ahora jugamos todos,
al juego del ajedrez,
donde por fin dejemos los lodos,
que soñamos alguna vez.

Toño Villalón

REFLEXIONES PARA UNA SOLA MANO



Árbol que gritas desde la desnudez de tus ramas, que nos anuncias y anticipas las vidas olvidadas, los huéspedes desposeídos, los buscadores sin mapa ni fortuna, los caminos transitados y los pies doloridos. De la muerte sacas fuerzas porque no quieres silenciar las injusticias que tus hermanos talados lloran ya en pañuelos de celulosa. Tus mensajes nos alientan y enseñan a pensar, a respetar y a embellecer las historias que nos cuentas con metáforas que penden de tus frágiles extremidades. Los zapatos nos mostraron los pasos y las huellas que dejamos por el mundo, la lana nos ayudó a tejer los sueños y a poner color a los horizontes apagados y las medicinas nos recuerdan que el dolor tiene cura, las heridas apósitos y que las peores enfermedades son el olvido y la indiferencia. Quiero tocar madera y beber de tu suerte engalanada que no calla, quiero contagiarme de tu constancia, posicionarme con tu solidez y hacer de la humildad el canto que tú dignificas. A cambio prometo seguir regándote de recuerdo, nutriéndote de ideas y haciendo que en tu nombre nos reunamos para celebrar la vida, reescribir el futuro y sembrar la esperanza.

Toño Villalón

LITERATURA PARA UNA SOLA MANO



Retrósalo, artilocápico, buclol, mitraciclal, vetinucópico…son solo algunos ejemplos de las creaciones inéditas de las estanterías de la librería “cuarto y mitad de fonema”, cuando sus dueños al anochecer echan la trapa. Los grafemas de todos los libros se intercambian y juegan a crear, cual orgía literaria: palabras nuevas, microrrelatos, poesías y jitanjáforas. Una mañana una de ellas no regresó a tiempo a su libro. Estuvo camuflada todo el día, sin que nadie se percatase, en un letrero de un estante donde se leía “HistoriaS”. Benditas letras que son capaces de enriquecer hasta los despistes.

Toño Villalón